La Organización Mundial de la Salud (OMS) se encuentra vigilante de la “Viruela sísmica” o Viruela del mono transmitida directamente como un virus de los animales a las personas. Esta enfermedad viral extremadamente rara que es similar a la viruela, pero se considera clínicamente menos grave, según la Organización Mundial de la Salud. Los casos generalmente ocurren en África occidental y Central. Varias personas han sido diagnosticadas con viruela símica recientemente en áreas que normalmente no ven la enfermedad, incluidos Canadá, Portugal, España, el Reino Unido y Estados Unidos.
“La viruela sísmica se detectó por primera vez en los seres humanos en 1970 en la República Democrática del Congo (denominada en aquel entonces Zaire) en un niño de nueve años, en una región en la que la viruela se había erradicado en 1968” afirmó la Organización Mundial de la Salud.
Los primeros casos detectados fueron de contagios por sangre, líquidos corporales, lesiones cutáneas o la mucosidad de animales.
Las transmisiones se producen al tener contacto cara a cara con los pacientes, lo que expone significativamente a los miembros de una familia que padecen esta enfermedad.
La (OMS) Hace un llamado a la comunidad LGBT o LGTB que tengan mucha precaución ya que son los más expuestos a contraer dicha enfermedad por contacto sexual entre personas del mismo sexo.